BurraLab Pensil es un proyecto que surge de la red local de colectivos, vecinos y vecinas de las colonias populares de la Zona de la Pensil. Este lugar es llamado así por el Pensil Méxicano, lugar que servía de casa de descanso para algunos terratenientes de la Nueva España. Actualmente este barrio se encuentra bajo un proceso de desplazamiento y de alta especulación inmobiliaria que mantiene a sus habitantes en condiciones de informalidad y precariedad.
A partir de la pandemia por SARS- Cov-2 que inició en 2020, las personas integrantes de la Red Bicibarrio Pensil se vieron con dificultades de darle continuidad a sus actividades, por lo que frenaron muchas de estas. Posteriormente con el regreso presencial a las actividades se decidió reactivar esta red sin embargo la consigna no fue únicamente un retorno paulatino a las actividades sino la inclusión de otros grupos que previo a la pandemia no se habían involucrado en las actividades de la red, estos grupos fueron mujeres, niños, niñas y adolescentes del territorio.
Es así que por medio de la convocatoria del programa social Colectivos Culturales de la Ciudad de México se concursó y se recibió un apoyo por $100,000 pesos para la ejecución del proyecto denominado: Burralab Pensil. El Burralab es un laboratorio ciudadano que se prototipo a partir de tres talleres: Dos talleres de mecánica básica, uno dirigido hacia mujeres y otro hacia niños y niñas. Además de un taller de innovación cultural para adentrar a los vecinos y vecinas en herramientas tecnológicas y organizativas que les pudieran servir ante el nuevo escenario de post pandemia.
Como resultado se beneficiaron directamente a más de 150 personas, se construyó de forma colaborativa un fanzine con un tiraje de 100 ejemplares, así mismo un cronograma de activación del territorio con actividades programadas hasta por 5 meses.
No obstante hubieron algunos otros resultados importantes de resaltar durante el proceso de este proyecto, entre ellos la vinculación estratégica con Pilares Tlacopan, Fundación del Centro Histórico, El Rule. Comunidad de saberes y el Centro Contracultural Tlalocan. Se desarrollaron 5 talleres más realizados por los vecinos y vecinas que participaron en el proceso, adoptando y haciendo suyas las herramientas proporcionadas con el taller de innovación cultural. Por último pero no menos importante el involucramiento de las mujeres en la activación de su territorio.
Sin embargo esto último se ve opacado por una problemática evidenciada a partir de este proyecto, esta problemática es el acceso de las mujeres a las actividades culturales, y por ende a sus derechos culturales. Este hallazgo surge después de una serie de entrevistas, mesas de trabajo y conversaciones informales con las participantes de los talleres, las principales causas de esto al menos con este primer acercamiento son atribuidas a: Las dobles y triples jornadas de trabajo que viven las mujeres de este territorio, la violencia machista por parte de familiares varones y la carencia de red de apoyo que respalde a estas mujeres, así como una nula cultura del autocuidado.
A partir de estos hallazgos y la participación más activa de la comunidad, es que al finalizar este proyecto se plantea un proceso que busca darle sostenibilidad a los grupos locales por medio de una Casa de la Burra, que es la consolidación de un Laboratorio de Iniciativas locales que como principal objetivo busca ser un espacio de encuentro para los colectivos propuesto pero principalmente para las mujeres del territorio, un espacio al principio físico pero posteriormente virtual que sirva como plataforma de vinculación para personas con los mismos intereses y que acerque la cultura a aquellas personas que por las desigualdades estructurales muy pocas veces tienen acceso a estos servicios.
Concluyendo así con el lema #SomosBicibarrioPensil.